Descripción

El concejal de Movilidad, Luis Vélez, se desplazó este lunes a Bilbao para mantener sendos encuentros con su homólogo en la capital de Vizcaya, Alfonso Gil, y empresas especializadas en el sector, de quienes recabó ideas de mejora para la oferta de transporte metropolitano, la señalización viaria y el aparcamiento urbano.

En este sentido, Vélez se mostró partidario de modernizar el sistema de gestión de la "Zona Azul" implantando nuevos parquímetros, tecnológicamente más desarrollados, y trasladando a Valladolid algunas de las nuevas funcionalidades de los aparatos que gestionan el aparcamiento en el área regulado por la ORA (OTA en Bilbao), que permiten la segmentación de las tarifas por colectivos, así como el pago del tramo horario a través de una aplicación móvil o mediante la tarjeta de servicios municipales que actualmente ya se utiliza en Valladolid para el pago del autobús o el alquiler de bicicletas.

Vélez destacó la posibilidad de aprovechar las funcionalidades de las nuevas tecnologías para adaptar los parquímetros "a la nueva realidad de los ciudadanos", así como aplicar tarifas distintas a distintos públicos o entornos, como por ejemplo, tener en cuenta el caso de los autónomos, que sufren más dificultades a la hora de aparcar en el casco histórico, o la zona de los hospitales, especialmente complejas a la hora de estacionar, concretamente, el Hospital Clínico.

El gerente de Open Traffic System, Celestino Fernández, explicó al concejal y el Jefe de Movilidad del Ayuntamiento de Valladolid, Roberto Riol, el funcionamiento de los dispositivos instalados en las calles, conectados a un centro de control que registra los datos del usuario, de forma que no es necesario depositar el ticket del pago del aparcamiento en el salpicadero del vehículo, puesto que a través de la matrícula del coche o los datos de la tarjeta, desde ese centro se vigila que el conductor ha satisfecho el importe.

El objetivo es "dejar el aparcamiento en superficie para conductores que vengan a la zona de aparcamiento limitado a hacer una gestión rápida y forzar el uso de parkings subterráneos o transporte público para el resto", partiendo de la premisa de que el 30% del tráfico urbano son vehículos buscando dónde aparcar.

El modelo de Bilbao plantea que el tiempo de aparcamiento es limitado en cada zona urbana (hay varias, dependiendo de la lejanía o cercanía del centro, aquellas con menos restricciones que estas últimas). La restricción también es distinta dependiendo del tipo de usuario, de modo que el autónomo tendrá más facilidades que un usuario normal.

Los parquímetros disponen de un teclado alfanumérico Querty en el que el usuario tiene que teclear la matrícula de su coche, y el sistema está conectado 24 horas, los 7 días de la semana, con el centro de control, que determina la tarifa a aplicar.

Los parquímetros permiten el pago en metálico, con tarjeta de prepago o a través de móvil, y en estos dos últimos casos se reintegra el coste del tiempo no consumido.

El vigilante de la ORA comprueba los datos de cada vehículo a partir de la matrícula y en contacto con el centro de control, a través de la PDA. Una aplicación móvil permite que desde el smartphone se amplíe el tiempo disponible, sin necesidad de volver a la máquina o sacar otro ticket.

Con la tarjeta ciudadana (un paso más sobre el dato de la matrícula), idea que baraja Movilidad en Valladolid, ya no se determinaría sólo de qué vehículo se trata, sino que se registraría a la persona, de forma que se pueden establecer tarifas para colectivos.

Los parquímetros podrían permitir, además, la recarga del saldo de la tarjeta ciudadana. Asimismo, el grupo empresarial Serbitzu explicó las ventajas del vehículo "Visual Car", -similar al "Multacar" que funciona en Valladolid-, que vigila las zonas ORA menos céntricas y envía a las PDAs de los controladores, mediante el reconocimiento de las matrículas, la ubicación de vehículos sin ticket o fuera de tiempo.

El concejal vallisoletano explicó que se intentará introducir progresivamente estas mejoras a partir de 2016, de cara a la nueva adjudicación del contrato de gestión de la ORA, actualmente prorrogada con la empresa Dornier.

El equipo de Movilidad desplazado a Bilbao visitó, asimismo, una fábrica de elementos de señalización horizontal y vertical, así como las instalaciones de Aparkabisa y mantuvo encuentros con el concejal de Movilidad del Ayuntamiento de Bilbao, Alfonso Gil, y con los responsables del sistema Bizkaiabus, que presentaron su sistema de transporte interurbano.