Descripción

"Una decisión plenamente acertada. El tiempo nos ha dado la razón". Así ha definido el alcalde, Óscar Puente, la remunicipalización de la gestión del ciclo integral del agua en Valladolid. La creación de la empresa pública Aquavall ha sido positiva en todos los ámbitos, a pesar de los augurios que se lanzaban desde algunos sectores: las inversiones se han incrementado (46 millones de euros en obras adjudicadas), la plantilla continúa con la satisfacción de los trabajadores, y el precio del agua se ha mantenido igual que hace cinco años. Es más, el próximo 2023 el agua tampoco subirá. "El tiempo nos ha dado la razón".


El alcalde de Valladolid, Óscar Puente, y la concejala de Medio Ambiente y presidenta del consejo de Administración de Aquavall, María Sánchez, han destacado la mejora "sustancial" en la gestión del agua de Valladolid coincidiendo con el quinto aniversario de la remunicipalización y que han permitido invertir 46 millones de euros en la mejora del servicio público, con las tarifas congeladas durante todo este tiempo.


"No se puede decir que haya sido un proceso sencillo, pues han sido muchos los obstáculos que hemos tenido que salvar", ha asegurado Óscar Puente, en referencia a todos los procesos judiciales que se plantearon por parte del sector privado y que en todos los casos los tribunales han dado la razón al Ayuntamiento de Valladolid. Las inversiones ya realizadas y las programadas los próximos años compensaran el abandono que tenían las redes de abastecimiento y saneamiento durante los últimos veinte años, cuando la gestión estaba en manos de una empresa privada.


En este sentido, la presidenta del Consejo de Administración de Aquavall, María Sánchez, ha destacado el importante trabajo desarrollado por todo el equipo de Aquavall y del Ayuntamiento como una de las claves del proceso. "La implicación ha sido máxima", ha elogiado.


Durante la rueda de prensa de balance, María Sánchez ha realizado un recorrido por las principales inversiones ejecutadas por Aquavall en los cinco primeros años de la nueva etapa de gestión pública que suman un total de 45.992.847 euros (IVA no incluido) en contratos adjudicados, sobre una licitación que ha superado los 50 millones de euros, y de los que se han ejecutado hasta ayer 34.116.422,92 euros, según los datos de contabilidad de la entidad.


Se trata de unas cifras que suponen un incremento "exponencial" respecto a la etapa de gestión privada en la que la empresa adjudicataria realizó inversiones por importe de 27 millones de euros durante los 20 años de contrato.


Tres de cada cuatro euros invertidos hasta ahora se han destinado a la renovación y mejora de las redes de saneamiento y suministro de agua potable, que han permitido intervenir en casi 95 kilómetros de conducciones, de los cuales 57 kilómetros se han realizado con tecnología sin zanja, un sistema que permite minimizar las molestias sobre la ciudadanía propias de las obras.


"Una de las prioridades en la gestión ha sido la renovación de redes tras años de abandono. Hemos visto las consecuencias con algunas averías que se han tratado de resolver siempre con la máxima celeridad", ha apuntado María Sánchez, quien ha insistido en que esta línea de trabajo se mantendrá para cumplir con los planes recogidos dentro del Plan Director.


Además de las redes, las instalaciones de potabilización y depuración han recibido una inyección de 7,3 millones de euros dirigidas a su modernización, mejora de la calidad del agua que llega a los hogares, sustitución de los equipamientos obsoletos y avance en la eficiencia energética.


A ello hay que sumar cerca de otro millón de euros más en otras inversiones como la renovación de la flota de vehículos de Aquavall con una apuesta por camiones y furgonetas eléctricas, de acuerdo con los compromisos medioambientales.



Tarifas congeladas

Todas estas inversiones se han realizado sin modificar las tarifas en estos cinco años de gestión pública, lo que sitúa a Valladolid entre las ciudades con el agua más barata de España. A lo que hay que añadir la aplicación de nuevas líneas de bonificaciones dirigidas a los más desfavorecidos.


"La gestión económica ha sido muy acertada, lo que nos permite abordar el futuro con optimismo a pesar de la situación macroeconómica complicada, con el encarecimiento mundial de los precios de la energía", ha apuntado Sánchez. En este sentido, ha mostrado la voluntad de mantener las tarifas actuales en 2023 sin repercutirlo en los ciudadanos, si bien la decisión final se tendrá que tomar a finales de año en el momento de la elaboración de los presupuestos y dependerá de la evolución de la economía. "Esto lo podemos hacer gracias a la gestión pública, donde situamos a las personas por delante de la cuenta de resultados", ha manifestado.



Entidad socialmente responsable

Además de la gestión económica, otro de los pilares del trabajo de Aquavall durante esta etapa ha sido la vinculación estrecha con la sociedad vallisoletana dentro de un amplio programa de Responsabilidad Social Corporativa (RSC), que ha puesto énfasis en fomentar el consumo responsable de agua, el fomento de hábitos saludables, el compromiso con el respeto del medio ambiente y la colaboración con eventos culturales, deportivos y distintas causas sociales.


En la nueva etapa de gestión pública también se ha reforzado la atención a la ciudadanía, con la ampliación de los horarios de oficina, la puesta en marcha de una oficina virtual para realizar las principales gestiones desde el ordenador o desde un teléfono móvil y se ha reforzado la atención telefónica.


El compromiso de la entidad pública por las personas, la información, la concienciación y la educación, y la transparencia ha hecho que Aquavall disponga de páginas webs accesibles, código ético, plan de igualdad y protocolo de acoso y de memorias de sostenibilidad auditadas externamente y publicado en Pacto Mundial.