Descripción

El Ayuntamiento de Valladolid, la Confederación Vallisoletana de Empresarios y la Cámara de Comercio e Industria mantendrán un nuevo contacto, el próximo mes de septiembre, para ahondar con detalles en un Plan Estratégico empresarial que permita a las tres instituciones colaborar en acciones que favorezcan el crecimiento, desarrollo e internacionalización de las empresas de la ciudad.


Se trata, en palabras del alcalde de Valladolid, Oscar Puente, de ayudar a crecer a empresas de pequeño o mediano tamaño, para que sean más competitivas y consoliden el empleo, mejorando así la economía de Valladolid.


Tras la primera reunión mantenida en el Consistorio con los máximos representantes de CVE, Ángela de Miguel, y Cámara, Víctor Caramanzana, Puente señaló que el Ayuntamiento "por supuesto, está interesado, porque la economía es lo prioritario y estamos claramente decididos a impulsar todo lo posible la economía local", aunque sí señaló que falta "ponerle apellidos" al Plan, es decir, el presupuesto, y saber en qué se traduce en concreto y de forma detallada.


El objetivo es que "las empresas pequeñas den el salto", señaló la presidenta de la CVE, Ángela de Miguel, "y vayan cogiendo tamaño, ayudándoles con un plan de estrategia y crecimiento que incluya elementos de innovación e internacionalización" para lograr que se consoliden, y, por otro lado, intentar "retener el talento que sale de nuestra ciudad y queremos que se quede aquí".


Las medidas, según indicó De Miguel, "son a largo plazo y serán distintas en función de cada empresa", de modo que se propondrá el trabajo particular de asesoramiento con cada una de ellas, según sus peculiaridades.


Por su parte, el presidente de la Cámara de Comercio, Víctor Caramanzana, incidió en que uno de los retos es conseguir incrementar el número de trabajadores de las empresas vallisoletanas, pasando de la media actual, 4,5 empleados, a 12, que es la media alemana, lo que conllevará que la calidad del empleo también sea mejor.


Caramanzana señaló que se hará un diagnóstico de las empresas, se pondrá en marcha un tutorial y "se intentará que las empresas pequeñas, que no tienen en su ADN salir fuera", vendan en el mercado internacional.


El Plan nacerá con vocación de ser sostenible en el tiempo, con un horizonte de tres años, y se basará, además de en la internacionalización, en la innovación y la mejora de la competitividad.