Descripción

Dividir la operación del soterramiento en siete fases, siete hitos, convirtiendo el objetivo de enterrar las vías en la última de ellas y algo "alcanzable", esa será la propuesta que el Ayuntamiento de Valladolid presentará el viernes, 21 de octubre, en la próxima reunión de los socios de la Sociedad Valladolid Alta Velocidad.

El alcalde de Valladolid, Oscar Puente, y el concejal de Urbanismo, Manuel Saravia, dieron a conocer esa propuesta, un "viaje por etapas, una ruta transitable frente al atasco que había hasta ahora", señaló Puente, "un plan que divide la operación en hitos, todos alcanzables, de los cuales, el primero garantiza el pago de la deuda y el resto va despejando incógnitas".

Así, en su opinión, se "pone luz sobre la ruta con racionalidad", de modo que el último paso será el soterramiento de las vías según el Plan Rogers original, es decir, un soterramiento completo y con la estación del ferrocarril también subterránea.

El concejal de Urbanismo y primer teniente de alcalde, Manuel Saravia, señaló que el proyecto diseñado por los técnicos de su departamento es una propuesta "realista, viable, responsable con las promesas que se han venido haciendo, atenta a la calidad de vida de la población actual, pacífica y modesta", puesto que diseña de forma ordenada "muy pocos elementos".

Saravia describió una a una las siete fases que, dijo, no tienen por qué ser sucesivas, sino que en ocasiones se superponen en el tiempo, siempre teniendo en cuenta que la última sería el soterramiento en sí.

Las fases comenzarían por un diseño y aprobación, en primer lugar, de una unidad de actuación que valga cerca de 400 millones de euros, que pueda desarrollarse, urbanizarse y venderse sin necesidad de ninguna actuación ferroviaria, y sirva para ir cubriendo la deuda ya contraída. Tendría, por así decirlo, vida propia. Pues en cuanto quedase libre de las instalaciones que ocupan esos suelos (talleres, estación de autobuses, instalaciones anejas a la estación Campo Grande) comenzarían en ella las obras de urbanización y edificación correspondientes.

El objetivo del Ayuntamiento es contribuir a saldar la deuda que la Sociedad tiene con el pool bancario en la medida de sus posibilidades, entendiendo que lo más sensato en la actualidad es mantener la financiación de la primera pieza fundada en el aprovechamiento urbanístico. Que el Ministerio de Fomento (que es quien puede) la vaya asumiendo (de una vez o conforme al calendario de pagos que establezca), y la Sociedad dedique una pieza, una "unidad de actuación", a resarcir a Fomento de esos pagos.

En cuanto a los plazos estimados, el Ayuntamiento está en disposición de contar con un documento de proyecto de actuación con determinaciones completas de reparcelación y básicas de urbanización en un plazo de 5 semanas. Además, al mismo tiempo, se completará el Proyecto de Urbanización en 6 semanas.

A continuación, deberá revisarse por los socios de SVAV y obtener el visto bueno de todos ellos en un plazo de 3 semanas. Una vez presentado por la sociedad para su aprobación, el Ayuntamiento tramitaría la aprobación inicial, publicación y exposición pública en un plazo de 8 semanas. Antes de la aprobación definitiva por parte del Ayuntamiento deben resolverse otras actuaciones relativas a los suelos como el traslado de talleres, descontaminación, etc.

2º. El segundo paso contemplado en el plan (aunque cronológicamente sería anterior al primero) sería el traslado urgente de los Talleres de RENFE. Para que la unidad anterior pueda ser operativa es necesario efectuar, con la máxima urgencia, la mudanza de los Talleres a la nueva BMI de Renfe construida en el nuevo Complejo Ferroviario, lo que supone, en estos momentos, resolver algunas cuestiones administrativas (de protección de incendios) y de operatividad de la maquinaria; para después iniciar las demoliciones y la descontaminación de los suelos, antes de proceder a la urbanización y edificación.

Los plazos estimados son de 6 meses desde la resolución de los conflictos de los contratos de maquinaria.

3º. Realización de obras provisionales y, en lo posible, compatibles con el soterramiento. Actuaciones para mejorar la permeabilidad en Pilarica (plaza de Rafael Cano y túnel de Aviador Gómez del Barco), Circular (paso peatonal) y Labradores (paso peatonal y mejora del rodado, para hacerlo funcional.

Y actuaciones de mejora de los bordes, en todo el recorrido, incluyendo la intervención en algunas zonas junto a las vías, como un pequeño parque en los terrenos de la antigua nave de Aprendices (Delicias). Los cierres del ferrocarril se mantendrán en condiciones de seguridad y ornato. Las obras de borde a cargo del Ayuntamiento. Las de permeabilidad, financiadas por la Sociedad; pues aunque sean provisionales corresponden a una tardanza que no es responsabilidad municipal.

En buena parte se trata de obras provisionales. Y compatibles con el Plan Rogers. Es importante definir en condiciones las características de las obras provisionales, de forma que acaben integrándose en la propuesta final, de ser posible.

4º. Construcción de la nueva estación de autobuses, y liberación posterior del suelo. Construcción de la nueva estación de autobuses en el ámbito de la de viajeros del ferrocarril. Una vez trasladada, y demolida y limpia la parcela la estación de autobuses, inicio de la venta de parcelas.


5º. Realización de las obras de Adif (completar el by pass y estación de mercancías) a su costa y de acuerdo a su propio calendario. Fijando, en cualquier caso, un límite de tiempo para estar realizadas. Son imprescindibles para el desarrollo de las siguientes fases. Hay que revisar el contrato suspendido por ADIF.

6º. Completar los traslados de Argales, levantar las vías de Ariza y comercializar ambas áreas. Se mantiene la ordenación de ambos espacios conforme lo previsto en el Plan Rogers. Depende del punto 5º.

7º. Obras de la estación de viajeros y Soterramiento de las vías. La última fase de la propuesta es la que motivó todo el proyecto: el soterramiento de las vías, al norte y al sur de la estación de viajeros. Siguiendo lo previsto en el Plan Rogers, y urbanizando el corredor resultante conforme al mismo. La estación debe resolverse soterrada. Según última valoración de Adif, el coste de la estación es de 80,28 millones de euros (esto es inasumible) y se ejecutaría de forma conjunta y dentro del plazo del soterramiento.

Se financiará con los aprovechamientos resultantes de las áreas de Argales y Ariza, además del de las parcelas próximas a la estación de viajeros, que no figuraban en la unidad de actuación nº 1. El coste del túnel urbano se estima en 374,96 millones de euros. Y el plazo de realización: 4 años, a contar desde 2019.

En síntesis, con la nueva reformulación podría pensarse que el conjunto de la integración del sistema ferroviario en la ciudad, con el resto de las actuaciones previstas, podría comenzar en 2017 y estar concluido en 2023. Aunque al ser los plazos abiertos, explicó Saravia, depende de la articulación de las distintas fases o momentos.