Descripción

El alcalde de Valladolid, Óscar Puente y la concejala de Servicios Sociales, Rafaela Romero, han presentado el convenio de colaboración firmado entre el Ayuntamiento de Valladolid, Fundación la Caixa, Cáritas Diocesana y Fundación Casa Aleste destinado al desarrollo de un proyecto de intervención infantil y juvenil en el barrio de Las Delicias.

El convenio que hoy se ha firmado tiene por objeto favorecer el desarrollo del proyecto de intervención infantil y juvenil que da continuidad al iniciado en septiembre de 2016 y al firmado en marzo de 2018 en los que se aunaron voluntades y recursos de todas esas entidades para abordar las necesidades de un sector de población especialmente vulnerable en el barrio de Delicias.

Desde el consistorio se ha agradecido, una vez más, a la Fundación La Caixa su compromiso con Valladolid y con las personas de nuestra ciudad. En esta ocasión, Fundación La Caixa se implica económicamente en la cofinanciación del proyecto, aportando 25.000 euros, que sumados a los 25.000 euros con los que contribuye el Ayuntamiento, hará posible este proyecto, que Caritas Diocesana, a través de la Parroquia de Santo Toribio, y la Casa de Juventud Aleste desarrolla en el barrio de Delicias.

Además, de la cantidad mencionada, el Ayuntamiento aportará los recursos humanos y materiales necesarios para la coordinación y seguimiento del proyecto. Y sus trabajadores sociales llevarán a cabo las labores de valoración y derivación de los posibles usuarios de los proyectos, se coordinarán con las entidades firmantes del convenio para el seguimiento de los casos y evaluarán y plantearán las posibles modificaciones en la continuidad de los mismos. Así mismo, el Ayuntamiento facilitará la infraestructura e instalaciones para desarrollar, en sus dependencias de Canterac, el proyecto de esa zona implementado por "Aleste".

El convenio que hoy se rubrica, y que da continuidad a los suscritos en años precedentes, persigue intervenir en un barrio, el de Delicias, el más populoso de Valladolid, en el que tienen lugar situaciones que se intentan corregir, como la que atraviesan jóvenes que abandonaron sus estudios y que se encuentran sin trabajo u otras derivadas de la convivencia intercultural o interétnica, que, en ocasiones, lejos de ser enriquecedora, es fruto de tensiones.

En este sentido, se quiere intervenir en esa realidad y ofrecer, en la medida de las competencias y posibilidades del Ayuntamiento, respuestas concretas y eficaces. Así, en el marco de este convenio se promueven sendos proyectos que tienen como centro de atención, por un lado, el apoyo a la educación, a la animación sociocultural, a la promoción y autonomía de jóvenes y de personas adultas como complemento al trabajo que se hace desde los servicios sociales municipales, que es desarrollado por la Casa de Juventud Aleste y, por otro, el trabajo de educación de calle y de ocio dirigido desde la Parroquia de Santo Toribio, que de forma tan admirable viene realizando desde hace muchos años en ese barrio.

Resultados positivos del trabajo realizado


El esfuerzo que realiza tanto el Ayuntamiento como el resto de entidades que firman el convenio ha obtenido resultados positivos, tal como muestran algunos datos referidos al convenio que se firmó el pasado 2018. En el anterior convenio en el proyecto realizado por la Casa de Juventud Aleste se trabajó con menores, en un número de cincuenta durante el curso y otros cuarenta en actividades realizadas durante el verano.


Esos menores, que se encontraban en situación de vulnerabilidad infantil, fueron derivados a este proyecto por los profesionales de los CEAS. La evaluación de satisfacción y de logro realizada con los grupos de menores muestra muy buenos resultados. Y cabe señalar que en la intervención que se está desarrollando en el presente curso y que ampara el convenio que hoy se firma, se está trabajando con un grupo similar de menores, en torno a 50.

Aleste ha intervenido en 2018 también con un grupo de adultos, en concreto quince hombres, de entre veinticinco y treinta, perceptores de Renta Garantizada de Ciudadanía, de etnia gitana o inmigrantes, con los que se trabaja en la mejora de las competencias sociales básicas y habilidades y en la empleabilidad.

A su vez, en el proyecto de Caritas, que se aborda desde la Parroquia de Santo Toribio, se ha apoyado fundamentalmente la creación de un grupo de jóvenes de etnia gitana en situación de riesgo de exclusión, a los que, a través del deporte, concretamente del futbol sala, se ha pretendido procurar una vía de enganche, que posibilitara trabajar con ellos en otros muchos aspectos, facilitando, así, vías para su integración. Se ha trabajado con un grupo focal de trece menores, así como en la integración de un proyecto global de 108 menores y jóvenes, que se encontraban en situación de vulnerabilidad social y familiar. La experiencia ha resultado muy positiva y se ha dado continuidad a la misma en el presente curso con los mismos grupos y objetivos.