Descripción

La Sala Municipal de Exposiciones de la Iglesia de las Francesas presenta a partir de HOY jueves día 3 de septiembre, la exposición "JOAN MIRÓ. Cántico del Sol y otros diálogos literarios".

La obra gráfica de Miró no debe considerarse un complemento de su quehacer plástico. Se trata de una de las múltiples facetas cultivadas por el artista a la que imprime su sello. El interés de Miró por este forma de plasmación del arte tiene, como él mismo dijo, dos razones fundamentales: por un lado, la posibilidad de realizar varios ejemplares de una obra de forma que puedan acceder a una mayor cantidad de público y por otro, le permite obtener una serie de efectos plásticos en cuanto a formas, materiales y texturas, muy diferentes a los obtenidos mediante la pintura, con lo que logra novedosos resultados.

El mismo dijo: …La emoción es lo que me mueve. No pertenece al dominio de los sentimientos. Es como si me picara un chinche.

La dedicación de Miró al grabado se extiende a lo largo de casi 50 años; se inicia en París, siendo una de sus primeras obras impresas "Il était une petite pie" (Erase una pequeña urraca) de 1928, y finaliza con su muerte. Tal importancia llega adquirir esta técnica, que en 1954 recibe en la Bienal de Venecia el Premio de la Sección de Grabado.En su labor como grabador Joan Miró usó diversos procedimientos técnicos. La base de todos ellos consiste en plasmar su idea e imagen en una matriz o plancha y pasarla luego a papel.

El proceso de plasmar en papel lo que el artista ha creado en esas planchas puede adoptar diversas formas. Puede ser un grabado en hueco directamente por el trabajo del artista o un grabado en hueco indirecto a través de ácidos corrosivos. Este es el caso del aguafuerte y las aguatintas, dos procedimientos que empleó el artista.

Otro procedimiento es el grabado en plano, se trabaja sobre una plancha sin incidir en ella, es el caso de las litografías - que realiza a partir de los años 30- y serigrafías de las que también tenemos ejemplos en su obra.

El proceso creativo de Miró lo describe él mismo: …siempre nace de un estado de alucinación, provocado por un choc, ya sea objetivo o subjetivo, y del cual yo soy totalmente irresponsable. En cuanto a mis medios de expresión, me esfuerzo por alcanzar el máximo de claridad, de potencia y de agresividad plástica, es decir provocar primero una sensación física para luego llegar el alma.

Sin embargo pese a lo que de espontaneidad hay en sus obras, todas son fruto de un proceso reflexivo anterior.

…Incluso unas cuantas pinceladas casuales limpiando mi pincel pueden servirme como punto de partida de una obra. Sin embargo la segunda fase está pensada con todo detalle. La primera fase es libre, inconsciente, pero después la pintura está totalmente controlada, de acuerdo con el deseo de trabajo disciplinado que he sentido desde el principio.

En cuanto a los temas que impregnan toda la obra de Miró podemos destacar sus criaturas (no se sabe bien su sexo), el sol, la luna, las estrellas, los pájaros, el ojo y la escalera. De estos temas el propio Miró reconocía: …no hago dibujos de cosas reales. Los objetos que veo me sirven como estímulo, pero el resultado son formas analógicas. Violentas, pero con frecuencia más esquemáticas.

Efectivamente el artista somete a sus personajes y demás creaciones a un proceso de esquematización, con lo que los reduce a su mínima expresión, por medio de la simplificación de formas, líneas y colores.

Por lo que se refiere a los colores que impregnan sus creaciones, él mismo reconocía que primero le da importancia a la forma, los colores llegan solos una vez que se ha determinado ésta. El negro, rojo, azul, amarillo y verde se pasean por sus obras con absoluto dominio reflejando la preferencia del artista por el contraste de colores.


Colaboración con escritores y poetas

La entrada de Joan Miró en el mundo de la literatura se produce de la mano de André Masson, quien a partir de 1925, le presenta a un buen número de poetas y escritores. El propio pintor declaró que los escritores le interesaban mucho más que los artistas plásticos.

Joan Miró era un gran lector, leía con afán durante la noche. El mismo declaraba que siempre tenía un ejemplar de Rimbaud junto a él, en su taller o su mesilla. Fruto de esta pasión surgen de su mano más de 260 libros ilustrados.

Las referencias en la obra de Miró hacia la literatura son abundantes. Por un lado están los títulos de sus obras, que con frecuencia incluyen referencias poéticas:"Llama en el espacio y mujer desnuda", "El diamante sonríe al crepúsculo", o "Mujer soñando con la evasión". Por otro la lectura e ilustración de diversos escritos, no sólo se centrándose en textos de sus amigos surrealistas, Breton, Éluard, Leiris, Tzara, sino también en los autores redescubiertos por ellos. Esta conexión, al igual que en Picasso, fructificó en el trabajo de obra gráfica en los libros ilustrados, de los cuales Miró llegó a realizar doscientos sesenta y dos.

Su trabajo de ilustrador sólo se llevaba a cabo tras una lectura y comprensión profunda del texto. Si bien en un primer momento el artista actúa como traductor fiel de las palabras del poeta, hay un segundo momento en el que escritor y pintor establecen un diálogo en la creación de la obra.

Se inicia esta exposición con El Cántico del Sol de San Francisco de Asís, formado por 32 aguafuertes y aguatintas, en las que el santo, desde un punto de vista teológico, declara su por la naturaleza y, agradece al Señor por el sol, la luna, las estrellas, el viento, el agua, el fuego y la tierra.

Estas palabras, son traducidas por Joan Miró en imágenes plagadas de astros, criaturas, olas, prados, mar … todas ellas de gran simplicidad formal.

Texto e ilustraciones guardan una gran afinidad; desde conceptos estéticos y culturales distintos se trasluce que ambos, poeta y artista, coinciden en su visión del mundo que les rodea.

Otros de los libros que forman parte de la muestra son Barcelona (1964), editado con motivo de las tres exposiciones que se llevan a cabo simultáneamente en esta ciudad en la Sala Gaspar, René Metrás y Belarte. En este libro, las litografías de Joan Miró aparecen acompañadas de textos de los más importantes escritores y críticos, como Joan Brossa, Alexander Cirici, Juan Eduardo Cirlot, J.V. Foix, Sebastiá Gasch o Rafael Santos Torroella. Las litografías de Miró traducen en gestos, manchas y líneas los paisajes y las gentes de la ciudad.

Liberte del Libertes (1971)

La serie de diez grabados pertenecientes a Liberté des Libertés fueron realizados para ilustrar las páginas del libro de poemas del escritor francés Alain Jouffroy, escritos que se realizaron desde 1960.

El trabajo de este escritor está fuertemente influenciado por las obras de los surrealistas, especialmente de Bretón. Su proximidad a los acontecimientos de mayo de 1968 le llevaron a fundar la Unión de escritores que contribuyó a la difusión de la poesía surrealista que él tanto trabajó.

Tapís de Tarragona (1972)

Este proyecto surge del agradecimiento de Joan Miró al doctor Rafael Orozco, que atendió a su hija Maria Dolores, la nochevieja de 1966, cuando fue atropellada por un tren en el paso a nivel de Montroig del Camp.

El pago al doctor, a petición de éste, fue su colaboración artística para el nuevo centro asistencial de la Cruz Roja de Tarragona.

En 1968 Joan Miró entrega un dibujo que será el primer borrador para el Tapiz de Tarragona, que será ejecutado por Josep Royo. Y tras unos meses entrega una pintura que servirá como base para la realización de un tapiz de grandes dimensiones. Aquel proyecto fue el inicio de un camino compartido entre Joan Miró y Josep Royo, que los lleva en búsqueda de nuevos espacios para la realización de sus obras conjuntas.

El desarrollo de estos trabajos queda plasmado en el libro "EL Tapís de Tarragona" que ilustrado por Joan Miró, y con textos de Rafael Orozco, Maria Lluisa Borras y Josep Royo edita la sala Gaspar en un tiraje especial de 100 ejemplares en papel guarro en 1972.

Papeles de Son Armadans. Ilustraciones

Papeles de Son Armadans es una revista editada por Camilo José Cela durante su vida de más de treinta años en Mallorca (1954-1988). La idea de crear una revista literaria llega en 1955, y el primer número aparece un año después. En su realización colaboran numerosos intelectuales españoles, tanto los residentes como los que estaban en el exilio. Sus ilustraciones se deben a los más importantes artistas.

Se muestran en esta exposición tres ejemplares en los que figuran ilustraciones de Miró: "Joan Miró, dibujos y litografías" .Número especial dedicado al artista. Tomo VI, nº XXI. Abril 1957.

Papeles de Son Armadans. Ilustraciones de Joan Miró dedicadas a El Paso, Tomo XIII, nº XXXVII. Abril 1959

Papeles de Son Armadans. Portada de de Joan Miró dedicada a Gaudí, Tomo XIII, nº XXXVII. Diciembre, 1959

Con palabras de Miró:

Lo importante es que un libro tenga la misma dignidad que una escultura tallada en mármol declaraba el artista Joan Miró a raíz de su colaboración con Paul Eluard para A toute ëpreuve en 1948.

La Exposición, permanecerá abierta en la Sala Municipal de Exposiciones de la Iglesia de las Francesas, hasta el próximo día 18 de octubre.