Descripción


Valladolid exhibe desde hoy y hasta el 20 de agosto, en la sala municipal de la Casa Revilla, la exposición GUERNICA DE PICASSO. LOS DIBUJOS PREPARATORIOS DE PABLO PICASSO PARA EL GUERNICA, que ha sido presentada por la concejala de Cultura y Turismo, Ana María Redondo.


En esta muestra pueden verse los 42 estudios sobre papel para el Guernica, una edición facsímil de los bocetos y dibujos previos de Picasso para el diseño del mural, que permite conocer, paso a paso, la génesis y desarrollo de una de las obras más simbólicas del arte contemporáneo español.


Durante el mes de enero de 1937 el Gobierno Republicano de España, propone a Pablo Picasso la realización de un mural para el Pabellón de la Feria y Exposición Internacional de Paris. En su proceso de realización la confección del lienzo se llevó a cabo mediante la creación de 42 estudios preparatorios y puede considerarse como una de las obras maestras y mejor documentadas del pintor.


Esta espectacular obra de Pablo Picasso, conmemorativa del bombardeo de Guernica por la aviación alemana que tuvo unas consecuencias de cientos de muertos y la casi absoluta destrucción de dicha villa de Vizcaya, puede considerarse el preámbulo de la II Guerra Mundial.


Con la exposición se puede seguir el hilo conductor del famoso mural desde su comienzo hasta su finalización en el que Picasso divulgó el horror e irracionalidad de toda Guerra.


Los estudios preparatorios, fueron editados en tres tipos de papel, se realizaron en 31 paspartús encerrados en un estuche. Esta edición realizada en Austria y Casariego en España, mereció el premio facilitado por el Ministro de Cultura al Libro Mejor Editado en el año 1990 en su modalidad de Bibliofilia y Facsímiles.


EL GUERNICA DE PICASSO

Reflejo fiel de una época y de unas luctuosas y dramáticas circunstancias, el lienzo Guernica nació para formar parte del Pabellón Español en la Exposición Internacional de París, de 1937. El motivo que impulsó a Pablo Picasso a realizar la escena representada en esta gran pintura fue la noticia de los bombardeos efectuados por la aviación alemana sobre la villa vasca que da nombre a la obra, conocidos por el artista a través de las dramáticas fotografías publicadas, entre otros diarios, por el periódico francés L'Humanité.


A pesar de ello, tanto los bocetos como el cuadro no contienen ninguna alusión a sucesos concretos, sino que, por el contrario, constituyen un alegato genérico contra la barbarie y el terror de la guerra. Concebido como un gigantesco cartel, el gran lienzo es el testimonio del horror que supuso la Guerra Civil española, así como la premonición de lo que iba a suceder en la Segunda Guerra Mundial. La sobriedad cromática, la intensidad de todos y cada uno de los motivos, y la articulación de esos mismos motivos, determinan el extremado carácter trágico de la escena, que se iba a convertir en el emblema de los desgarradores conflictos de la sociedad de nuestros días.


Guernica ha suscitado numerosas y polémicas interpretaciones, circunstancia a la que contribuye indudablemente la voluntaria eliminación del lienzo de cualquier tonalidad ajena a la grisalla. Al analizar su iconografía, uno de los estudiosos de la obra, Anthony Blunt, divide a los actores de esta composición piramidal en dos grupos, el primero de los cuales está integrado por tres animales: el toro, el caballo herido y el pájaro alado que se aprecia tenuemente al fondo, a la izquierda.


Los seres humanos componen un segundo grupo, en el que figuran un soldado muerto y varias mujeres: la situada en la zona superior derecha, que se asoma por una ventana y sostiene hacia fuera una lámpara; la madre que, a la izquierda del lienzo, grita llevando al hijo muerto; la que entra precipitadamente por la derecha; y finalmente, la que clama al cielo, con los brazos alzados, ante una casa en llamas.


En este mismo contexto, tampoco hay que olvidar que dos años antes, en 1935, Picasso había grabado al aguafuerte la Minotauromaquia, obra sintética que condensa en una sola imagen todos los símbolos del ciclo dedicado a este animal mitológico y que es, a la vez, el antecedente más directo de Guernica.


Los acontecimientos de la vida privada de Picasso, junto a los sucesos políticos que atribularon al continente europeo en el período de entreguerras, se fusionan en los motivos creados por el pintor en estos momentos, para dar lugar tanto al propio Guernica como a sus bocetos y post scriptum, considerados como unas de las obras de arte más representativas del siglo XX.