Descripción

El Ayuntamiento retomará "lo antes posible" el proyecto de construcción de una Planta de Transferencia de Residuos en el Polígono de San Cristóbal, del que se viene hablando en los últimos cinco años, sin que hasta el momento haya habido avances, y aprovechando una parcela municipal en la calle Nitrógeno.


El alcalde de Valladolid, Oscar Puente, que mantuvo junto a la concejala de Medio Ambiente, María Sánchez, y técnicos de su área, un encuentro con parte de la dirección de la Asociación Polígono San Cristóbal, integrada en FEPECYL, tras la cual señaló que es "una actuación que le da valor al Polígono, en la medida que facilita la gestión del residuo y la abarata, permitiría obtener un canon con la cesión de su explotación a una empresa, que crearía además puestos de trabajo, de modo que es una operación interesante desde el punto de vista industrial, medioambiental, económico y público".


De este modo, señaló que "no se entiende que estando sobre la mesa desde hace años no se haya llevado a cabo aún", y anunció una reunión con la Junta de Castilla y León, que es la institución que tiene que otorgar la licencia para su instalación.


Por su parte, la concejala de Medio Ambiente, María Sánchez, facilitó los datos de generación de residuos del Polígono, 120 toneladas al año, de las cuales sólo el 20% es urbano, de modo que el 80% restante no correspondería recogerlos al Ayuntamiento, lo que supone al Consistorio un gasto de 450.000 euros de coste anual.


Entre los materiales que se recogen, algunos son peligrosos, -baterías de coche, aceites, material informático, etc.- de modo que "hay necesidad de un centro cerca, lo que mejoraría su gestión y reduciría los costes".


La inversión para la construcción de la Planta de Transferencia sería de la empresa que resultara adjudicataria tras el proceso de licitación, de modo que el Ayuntamiento únicamente cedería la parcela, que, según señaló el alcalde, "cumple todos los requerimientos".


Por su parte, el presidente de la Asociación Polígono de San Cristóbal, Antonio Rodríguez, agradeció la visita y el "compromiso firme", y recordó que ya hace cinco años, cuando se planteó por primera vez, había tres empresas interesadas en ponerlo en marcha.


Rodríguez lamentó que la provincia de Valladolid no cuente con ningún punto de recogida de residuos, ni peligrosos ni no peligrosos, de modo que, ante la ausencia de una infraestructura de este tipo, "cada uno lo hace como puede, unos los tiran de cualquier manera, otros los llevan a puntos lejanos", con los costes que eso supone para los industriales.