Descripción

La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Valladolid, reunida esta mañana en sesión ordinaria, ha abordado los asuntos que figuran a continuación dentro del orden del día.

En el Área de Urbanismo y Vivienda, el órgano de gobierno ha concedido la licencia de obras para la rehabilitación y ampliación del Museo Arqueológico de Valladolid, situado entre las calles San Ignacio y Expósitos. Igual autorización se ha dado para la instalación de cuatro ascensores en edificios de las calles Lebrija, Lucayas, Hípica y Cisne.

Respecto a los permisos de primera ocupación, se ha otorgado a cinco viviendas unifamiliares construidas en el PERI "Pinar de Villanueva".

Entre los asuntos de este mismo Área, destacar la aprobación inicial del Plan Municipal de Suelo y Vivienda para el periodo 2008-2011, con el objetivo de intervenir en el mercado de suelo y vivienda.

Finalmente, también cabe destacar la aprobación de sendos expedientes de contratación de obras de urbanización en tres calles, las cuales podrían comenzar entre los meses de enero y febrero.

Por un lado, la reforma de la calle Real de Burgos, desde la calle Madre de Dios hasta Alamillos, por un importe total de 622.328 euros, repartidos entre los presupuestos de 2008 (198.972 euros) y 2009 (423.356 euros).

La actuación afecta a una longitud de 380 metros de vía, y se aprovecha la anchura actual de la misma para redistribuir los espacios quedando una calzada de seis metros, una franja de estacionamiento en línea a cada lado de 2,10 metros, se incorpora un carril bici -de 2,20 metros- para conectarlo con las calles adyacentes que ya disponen de él, mientras que la anchura de las aceras será variable.

En esta intervención se emplearán losas de terrazo rugoso pétreo en las aceras, y en las franjas de estacionamiento adoquín de hormigón prefabricado. Respecto a las acometidas de abastecimiento y saneamiento, se renovarán las existentes y se añadirá una de hidrante. El alumbrado público existente se recolocará para adaptarlo a la nueva geometría de la calle, retirando los brazos de las farolas para colocar las luminarias sobre báculos.

Por otra parte, la reforma que afectará a las calles Tudela y el tramo de la calle Don Sancho comprendido entre la de Cervantes y Tudela tiene un presupuesto que asciende a 782.272 euros, distribuidos entre los ejercicios de 2008 (195.568 euros) y 2009 (586.704 euros).

Las obras se harán siguiendo la estética de pavimentos y materiales colocadas en las últimas actuaciones del casco histórico y supondrá la renovación completa del pavimento de las aceras -con baldosas de hormigón-, del firme de la calzada -que tendrá una anchura de seis metros en la calle Don Sancho y de siete metros en Tudela-, la renovación de la red de abastecimiento y, puntualmente, la de saneamiento que se encuentre en mal estado.

La remodelación conllevará la ampliación de las aceras para facilitar la circulación peatonal y ordenar la superficie de aparcamiento existente, tendiendo a aumentar el ancho de los aparcamientos en línea y batería para facilitar las maniobras. Asimismo, se proyecta la canalización del alumbrado público, que en la actualidad discurre por fachada, y la sustitución de las luminarias existentes por otras nuevas.

Finalmente, indicar que los contenedores de residuos sólidos urbanos quedarán soterrados al igual que en otras calles del casco histórico, mediante la colocación de siete depósitos de hormigón, para cuatro unidades cada uno, con sistema de elevador hidráulico.