Descripción

El arzobispo Carranza fue sometido por la Inquisición a un proceso judicial acusado de herejía. Una vida truncada por el oro, la envidia, y el resentimiento, pero que tampoco fue ajena a la amistad, la confianza o la fe, y por cuyas pasajes aparecen personajes como Carlos V, Felipe II, Pablo III, María de Tudor, Francisco de Borja, Teresa de Jesús, Pío V o Gregorio XIII.